Por Normando Hernández, ex prisionero de conciencia cubano del grupo de los 75
Estoy seguro que Nuestro Señor Jesucristo le dijo al Santo Padre que lo manda a Cuba “como oveja en medio de lobos”. Hace medio siglo que en la isla no se respira libertad y a solo cinco días de su visita la mayor de la Antillas está que arde. También estoy seguro que le recomendó que “sea prudente como serpiente y sencillo como paloma”.
El Papa Benedicto XVI visita a los cubanos en momentos de definición. Hoy en día los colores grises no son bien mirados por los que sufren la imposición de un régimen totalitario de 53 años de existencia. La filosofía del criollo es bien sencilla: Estás con Dios o con el diablo.
Hoy en Cuba la represión está a la orden del día. Solo el pasado fin de semana la policía política de los hermanos Castro detuvieron de forma violenta alrededor de 80 opositores de todo el país. Desde Matanzas, Villa Clara, Holguín, Santiago de Cuba se reportaron brutales arrestos. En la Habana 33 Damas de Blanco fueron arrastradas, maltratadas, golpeadas y humilladas por mujeres policías vestidas de civil, para impedirles la habitual marcha que realizan cada domingo, después de misa, reclamando la libertad de los presos políticos y el respeto de los derechos humanos del pueblo de Cuba. Se calcula que en total fueron arrestadas cerca de 70 de estas mujeres, a quienes pusieron en libertad horas más tarde.
El oficial de la policía política que se hace llamar Alejandro le aseguró a la líder de Las Damas de Blanco, organización integrada en sus inicios por esposas, madres e hijas de los prisioneros de conciencia de la Primavera Negra de Cuba del 2003; que solo permitirían ir a misa a las Damas de Blanco de la Habana, pero que las de otras provincias serían detenidas en caso de asistir a esta celebración religiosa.
Por otro lado, el martes 13, miembros de la sociedad civil tomaron de forma pacífica iglesias católicas, en las provincias de Pinar de Rio, Las Tunas, Holguín y la Habana aseguraba desde dentro de la isla el activista de derechos humanos Ignacio Estrada. Los ocupantes de las iglesias, pertenecientes al Partido Republicano de Cuba, demandaban libertades políticas y sociales.
Los ocupantes pacíficos del Santuario y Basílica Menor de Nuestra Señora de la Caridad en La Habana, fueron desalojados en la noche de jueves 15 por efectivos de la policía a pedido del Cardenal Jaime Ortega. "Fuimos sacados brutalmente del templo", aseguró Emilio Torres Pérez.
Por su parte Roniel Valentín Aguillón, otro de los ocupantes, dijo que fueron trasladados a una unidad de la Policía en el municipio Cerro.
"Nos hicieron miles de pruebas, como si fuéramos asesinos, nos tomaron huellas, nos cortaron pelo, tomaron muestras de orine, nos pesaron, nos tiraron fotos", cogieron muestras "de sudor de las partes de uno, a las mujeres las desnudaron". Testimonios publicados en diariodecuba.com después que fueran puestos en libertad.
Mientras que la iglesia insiste que su misión es humanitaria y no política el nuncio apostólico del Papa en la isla, Bruno Musaro, y el arzobispo del La Habana, cardenal Jaime Ortega oficiaron, en la Catedral de La Habana, una misa por la salud del presidente venezolano Hugo Chávez. Sin embargo hacen oídos sordos a los pedidos de las Damas de Blanco para la celebración de una misa “por nuestros muertos”, reportaba Martinoticias.com en referencia a los disidentes fallecidos Laura Pollán, Orlando Zapata Tamayo, Juan Wilfredo Soto y Wilman Villar. Y aunque la agenda del Papa está abierta para si Fidel Castro desea encontrase con él, no ocurre así con las súplicas realizadas por la disidencia cubana que le solicita un minuto de su presencia. “(Con la iglesia) estamos hablando el mismo idioma y no hay por qué no hablar el mismo idioma” declaraba el embajador de La Habana ante el Vaticano, Eduardo Delgado y sostuvo que “lo que persigue la revolución cubana es lo mismo que persigue la Iglesia católica”. Nadie de la Iglesia ha desmentido estas declaraciones, al menos que yo conozca.
No obstante, ante tanta indiferencia con los disidentes cubanos, voces solidarias con los derechos de las personas de “la tierra más bella que ojos humanos han visto” Piden al Papa interceder por los derechos humanos en Cuba.
"Es hora de que cese la represión para que los cubanos puedan ejercer sus libertades en pos de esa visión", subraya una declaración de la Red Latinoamericana y del Caribe para la Democracia (REDLAD) en la que se pide que la visita del Papa a Cuba sea una oportunidad para que cese la represión y se inicie un diálogo” reporta Martinoticias.com.
“La declaración está firmada por el Nobel de la Paz, Desmond Tutu; la ex primera ministra de Canadá, Kim Campbell, y el canciller checo, Karel Schwarzenberg. También fue firmada por los ex presidentes Luis Alberto Monge, de Costa Rica; Alfredo Cristiani y Armando Calderón Sol, de El Salvador y el príncipe jordano Hassan bin Talal”
Por otro lado “fue ratificada por un consorcio trasatlántico de grupos de la sociedad civil a favor de la democracia, entre ellos: Foro 2000, UN Watch, People in Need y el Movimiento Mundial por la Democracia”, que piensan “que la visita de Benedicto XVI a Cuba ofrece una oportunidad vital para resaltar la negación de la libertad, la democracia y los derechos humanos básicos a la ciudadanía en la isla”
El ex presidente de Polonia y también premio Nobel de la Paz, Lech Walesa hizo pública una carta a Benedicto XVI en la que le pide “tome la defensa de esos cubanos que reclamando la libertad se arriesgan con las persecuciones y vejaciones”
Asegura el premio Nobel en su carta que la sociedad civil de Cuba “no está gozando de las libertades ciudadanas” y “suplica” a su Santidad “interceder por los que, a causa de sus convicciones, caen en las prisiones”.
Son muchas, pero muchas las personas y ONGs, que aquí no pongo por razones de tiempo y espacio, que le suplican a su Santidad se entreviste con una representación de la sociedad civil cubana, entre el 26 y el 28 del presente cuando viaje a Cuba a celebrar el cuarto centenario de la aparición de la Caridad del Cobre, en la Bahía de Nipe.
El Papa con su visita definirá si está a favor o en contra del sufrido pueblo cubano.